Algunas de las formas como ciertos entrenadores se
comunican con sus dirigidos en los entrenamientos y a la hora de la competencia
es digna de estudio. El uso de algunas palabras para tratar de impulsar acciones
que deben hacer los jugadores según quien dirige, deja mucho que desear en
quienes dan la orden para aplicar la táctica que ordenan los entrenadores en
cada oportunidad. Ninguna persona debe acostumbrarse a los cuatro gritos y al
uso de palabras, que en muchas ocasiones tienen más fuerza que puñetazo bien
medido. Así mismo, es de reconocer que en algunas ocasiones esa deficiencia es
compartida por varios responsables, donde cuenta en un gran grado el
entrenador, por no aceptar su deficiencia.
Las palabras que deben usar quienes tienen la
oportunidad de dirigir equipos, debe ser de respeto, prudente, además que en
sus frases se pueda observar lo diáfano del mensaje que se expresa, que no haya
dudas de la buena forma o buena intención que quiere expresar el entrenador
para cuando se dirige a sus subordinados, además de la comunicación que por lo
general debe realizarse con la parte gerencial del quinteto que dirige;
situación, que incluso debe ser copiada por quienes lo han observado como un
espejo de múltiples reflejos. El uso del lenguaje limpio para la comunicación
es posible que enamore en el mejor sentido de la palabra, y no haya quien
piense en el rechazo, en el bloqueo o en la negación a escuchar a tal o cual
entrenador.
Es indispensable, que dentro de la investigación
permanente que realiza cada entrenador o dentro de la formación que éste se
propone, tenga pendiente corregir las formas y el uso de las palabras adecuadas
para dirigirse no sólo a los jugadores, sino pensar en el uso de estas aún cuando
sale del rectángulo de juego. El uso de palabras escatológicas no debe ser lo
adecuado, ni siquiera en forma jocosa, ya que las mismas pueden desarrollar
acciones no adecuadas para uno u otros. Son muchos los entrenadores, que tienen
buena forma de comunicarse con los jugadores y otras personas, los destaca un
lenguaje pulcro para con sus prójimos, además el mejor sentido de las palabras
hace que sus dirigidos tengan un interés bien realzado para la comunicación de
éstos con quienes le rodean.
Amigos y amigas que leen éste espacio, sugiero que
cuando usted observe algún desastre contrario a lo anteriormente señalado
reclame lo correspondiente, pero también en buena manera, ya que la educación
no tiene con quien pelear bajo ningún motivo, dígale no a las palabras
escatológicas, evítelas y rechácelas y por si siente que es una necesidad
cámbiela por una bien aceptable y enamore con su forma de hablar. Saludos y
hasta la próxima oportunidad. @joseceden.
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